Por consiguiente, camisetas psg 2025 los reyes medievales ingleses conquistaron Gales y realizaron un intento fallido para anexar Escocia a su territorio. Europa continental. Su territorio está formado geográficamente por la isla de Gran Bretaña, el noreste de la isla de Irlanda y pequeñas islas adyacentes. Es denominado frecuentemente por el nombre de la isla que comprende la mayor parte de su territorio, Gran Bretaña, o también, por extensión, por el nombre de uno de sus países constituyentes, Inglaterra. El gentilicio del Reino Unido, así como el de la isla de Gran Bretaña es británico, aunque también, por extensión, se suele usar en el habla corriente el gentilicio inglés. El inglés es el idioma de facto en todo el Reino Unido, pero Escocia, Gales e Irlanda del Norte tienen lenguas regionales con diferentes grados de reconocimiento y protección. El inglés es el idioma de facto y como tal comprende una de las naciones centrales de la angloesfera. Aunque el Reino Unido, como Estado soberano, es un país, Inglaterra, Escocia, Gales, y en menor medida, Irlanda del Norte, también se consideran como «los países» (en su idioma original que es country, pues en español recibe el nombre de país constituyente o nación constitutiva, no aplicando ese caso), a pesar de que no son Estados soberanos.
La Revolución Industrial, liderada por el Reino Unido, transformó al país y dio sustento al creciente Imperio británico. En 1921, después de la guerra, la Sociedad de Naciones le otorgó el mandato sobre las antiguas posesiones del Imperio colonial alemán y, como consecuencia de la partición del Imperio otomano, también posesiones de este último. Los iroqueses se llamaban a sí mismos Haudenosaunee, que se traduce aproximadamente como «Gente de la casa larga», que simboliza cómo las cinco naciones se esforzaron por comportarse como familias que vivían en una sola casa larga. Pese a restauración de la monarquía en 1660, el interregno aseguró, tras la Revolución gloriosa (1688) y la Declaración de Derechos de 1689 (en inglés, Bill of Rights) y la Ley de Derecho, que a diferencia de los demás países europeos, el absolutismo real no prevalecería, y que un profesado como católico jamás podría acceder al trono. Algunos resúmenes estadísticos también se refieren a los países constituyentes de Inglaterra, Escocia y Gales como «regiones», mientras que a Irlanda del Norte se le conoce como «provincia». Coloquial y erróneamente se denomina Gran Bretaña e Inglaterra, consecuencia del mayor peso de ambos (territorio y reino, respectivamente) dentro del Estado. La página web del primer ministro británico ha utilizado la expresión «países dentro de un país» para describir al Reino Unido.
En 1066, los normandos invadieron Inglaterra desde Francia y después de su conquista, tomaron el poder de grandes partes de Gales, Irlanda y fueron invitados a establecerse en Escocia, introduciendo al feudalismo de cada país el modelo francés y la cultura normanda. En 1603, Jacobo VI de Escocia heredó la corona de Inglaterra e Irlanda, lo cual unió a los tres reinos y se trasladó su corte desde Edimburgo a Londres; no obstante, cada país seguía siendo una entidad política independiente, al mismo tiempo que conservaban sus instituciones políticas, legales y religiosas separadas. A su vez, el sistema de ligas de Inglaterra incluye cientos de ligas interconectadas con miles de divisiones. La constitución británica se desarrollaría sobre la base de una monarquía constitucional y un sistema parlamentario. Es gobernado mediante un sistema parlamentario con sede de gobierno y capitalidad en Londres, pero con tres administraciones nacionales descentralizadas en Edimburgo, Cardiff y Belfast, las capitales de Escocia, Gales e Irlanda del Norte, respectivamente. Al mismo tiempo, la victoria del partido Sinn Féin en las elecciones generales de 1918, seguida por una guerra de independencia, llevaron a la creación del Estado Libre Irlandés; Irlanda del Norte optó por seguir formando parte del Reino Unido.